Si los resultados de las pruebas apuntan a problemas de ovulación, pueden utilizarse medicamentos de fertilidad. Drogas de fertilidad regulan y estimular la ovulación. Estimulan ovarios para que una mujer puede producir y madurar uno o más óvulos por ciclo. Para los hombres, fármacos ayudan a aumentar su nivel de producción de esperma.
La droga de fertilidad más utilizado es Clomid, que contiene citrato de clomifeno. Unos 40 a 45% de las parejas con Clomid concebir con éxito dentro de 6 ciclos de uso.
Otras dos drogas de fertilidad son Femara (Letrozol) y Without (anastrozole). Estos dos medicamentos se utilizan para inducir la ovulación en las mujeres que tienen un trastorno ovulatorio. Mientras que la tasa de éxito con estos dos fármacos es similar a Clomid, un alarmante estudio ha indicado que Femara puede vincularse con causar defectos de nacimiento.
Otro tratamiento de infertilidad ampliamente utilizado es la inseminación artificial. Esto consiste en colocar especialmente lavado de espermatozoides en el útero. Este tratamiento se utiliza cuando las mujeres tienen problemas con su moco cervical. Infertilidad inexplicable es tratada con frecuencia a través de este método, y a veces se utiliza para semen de donante.
El tratamiento siguiente que es muy común es la FIV (fertilización In Vitro). Si una mujer ha dañado trompas de Falopio que son no reparable, a menudo se recomienda fecundación in vitro. Es también usado en casos de infertilidad inexplicable y de esperma anormal. El proceso implica fertilizar el huevo en un laboratorio y la implantación en el útero materno. El término 'bebé probeta' ha asociado con los bebés que nacen a través de este método.
